¿Qué son los postes eléctricos y para qué sirven?
Tipos de postes eléctricos
Los postes eléctricos son estructuras utilizadas por las empresas de servicios públicos para sostener cables y otros equipos necesarios para la distribución
Se trata de una estructura o columna utilizada para soportar líneas de transmisión aéreas.
Los materiales de los distintos tipos de postes eléctricos
A continuación, la clasificación de postes según el material con el que están hechos:
De madera
Los postes de madera se utilizan solo para líneas de baja tensión —230 o 440V—, y se les encuentra principalmente en áreas rurales. Una gran ventaja del poste de madera es que proporciona más aislamiento eléctrico.
Este tipo de infraestructura se caracteriza por ser la más rentable y antigua del mercado, debido al bajo costo, la fácil instalación y su duración.
No obstante, tienen varias desventajas: son más débiles que los de otros materiales; no pueden soportar pandeos o tramos largos; alcanzan una menor altura, etc. Asimismo, el costo su mantenimiento es muy alto, ya que deben reemplazarse una vez dañados.
Otro dato importante es que la vida útil de estos postes eléctricos se ve menguada principalmente por la lluvia, hongos y plagas de insectos, entre otros problemas.
De acero
Como una opción más duradera y respetuosa del medio ambiente —con una mayor capacidad de carga—, el acero se utiliza a menudo como alternativa para la madera. También son más confiables y fáciles de instalar.
Correctamente instalados y cuidados, pueden durar, en promedio, 60 años. La galvanización ayuda a maximizar su esperanza de vida.
Debido a su maleabilidad, el acero también ofrece flexibilidad con la longitud de esta estructura, lo que permite fabricar postes más altos, adecuados para cargas de mayor voltaje.
De concreto
Otro de los tipos de postes eléctricos es el de concreto, que tiene la capacidad de carga más alta de estas estructuras. Al igual que los de acero, son extremadamente resistentes a la putrefacción y al daño causado por la fauna salvaje; requieren de mantenimiento mínimo y resisten bien las condiciones climáticas adversas.
Las propiedades aislantes del hormigón también son similares a las de los postes de madera.
Los dos tipos principales de postes de hormigón que se utilizan para acomodar las líneas aéreas son el reforzado —útil para el peso y la estabilidad— y el pretensado —útil para la resistencia y la capacidad lateral—.
Sus principales desventajas radican en su costo de transportación —cuando no se fabrican en el sitio—, y en que tampoco se pueden modificar fácilmente. También son pesados e incómodos y pueden representar un riesgo para la seguridad cuando se dañan.
Su vida útil oscila alrededor los 50 años; su pesadez y relativa impenetrabilidad los convierten en la opción ideal para usar en áreas costeras, donde pueden soportar bien los vientos fuertes y los terrenos pantanosos.
Torres
Los caballos de batalla de la red eléctrica. Las superestructuras de acero conocidas como torres soportan líneas de alto voltaje a través de grandes extensiones abiertas.
Suelen ser vistas en áreas remotas, pero también están presentes en áreas urbanas, generalmente en secciones industriales de una ciudad.
Después de que la energía sale de la planta de generación, pasa a través de un transformador de subida, que eleva el voltaje exponencialmente a niveles tan altos como 750 KV.
La mayoría de las torres son de acero, pero también emplean madera para algunos postes de transmisión de un solo circuito. Requieren un derecho de paso de 36 metros, lo que significa que ningún árbol o estructura puede estar a menos de 18 m de cada lado.
Las líneas que sostienen pueden abarcar de 243 a 304 m antes de que se requiera otra torre de apoyo. En Estados Unidos y otras partes del mundo, la altura estándar de una de estas torres oscila entre 20 y 42 m.
Fuente: TECSA