Como bien se sabe, la neumática y la hidráulica usan fluidos para generar movimiento con fuerza y energía a través de máquinas simples y, otras no tan simples. Ambos sistemas están bien adaptados para hacer que las máquinas se muevan hacia adelante y hacia atrás y puedan operar a distancias considerables de su compresor o bomba sin necesidad de cintas transportadoras o engranajes.
¿Neumática o hidráulica?¿Qué es mejor para la construcción?
¿Por qué usar una máquina neumática en lugar de una hidráulica, o usar cualquiera de estos sistemas en lugar de algo eléctrico?
Los dos sistemas pueden lograr una potencia considerable con máquinas relativamente livianas; esta es una de las razones por las cuales los dentistas a veces usan taladros neumáticos, que son extremadamente potentes pero muy ligeros.
Si ambos tipos de potencia de fluido realizan trabajos similares, ¿por qué usar una máquina neumática en lugar de una hidráulica, o usar cualquiera de estos sistemas en lugar de algo eléctrico? Hay todo tipo de consideraciones quer tomar para poder llegar a una certera conclusión:
- Fuerza: Para aplicaciones de potencia media, alta velocidad, donde la precisión no es crítica, y la acción suave o se requiere de amortiguación (absorción de fuerza), los sistemas neumáticos a menudo son más eficientes que los accesorios hidráulicos. En consecuencia, es preferible usar el sistema hidráulico para aplicaciones de alta potencia, alta precisión, transmisión de fuerza elevada y cualquier aplicación donde las variaciones en la temperatura del aire o la presión puedan causar problemas para un sistema neumático. Pero cabe destacar que las máquinas hidráulicas tienden a moverse lentamente.
- Precisión: Las máquinas neumáticas generalmente son menos receptivas y menos precisas que las hidráulicas, en gran parte debido a la compresibilidad y la relativa imprevisibilidad del aire. Son menos eficientes para manejar y un poco más costosas, porque se necesita una cantidad relativamente grande de energía eléctrica para hacer funcionar un compresor y almacenar parte de esa energía en aire comprimido, y una buena cantidad de esa energía se desperdicia cuando se libera el gas comprimido.
- Control: Los motores eléctricos son relativamente pesados y giran, por lo que tienen un alto momento de inercia, un tipo de efecto de volante, que los hace relativamente lentos para arrancar y parar. Eso significa que toman tiempo para proporcionar la fuerza máxima y el tiempo para detenerse o retroceder. Las máquinas controladas por fluidos tienen un impulso relativamente pequeño, por lo que pueden iniciarse, detenerse e invertirse más rápidamente.
- Conveniencia: Las herramientas neumáticas utilizan presiones más bajas y fuerzas más pequeñas, por lo que tienden a ser más ligeras y compactas, lo que puede ser extremadamente importante en el caso de cosas como las herramientas de mano. Las herramientas neumáticas pueden estar hechas de plástico relativamente liviano, mientras que las hidráulicas tienden a estar hechas de metales para hacer frente a fuerzas y presiones más altas.
- Seguridad: A diferencia de los motores eléctricos, para la seguridad industrial en las máquinas neumáticas e hidráulicas no usan electricidad en el punto donde se está trabajando, por lo que hay menos riesgo de una chispa o explosión de gas. Además, ambos sistemas se enfrían por sí mismos y no hay posibilidad de sobrecalentamiento o quemaduras eléctricas. La fuga de fluido es un problema potencial tanto en los sistemas hidráulicos como en los neumáticos. Mientras que las herramientas y máquinas neumáticas invariablemente agotan su combustible de trabajo que es el aire, las unidades hidráulicas por sun parte están selladas y diseñadas para mantener la recirculación del mismo fluido. Dado que el fluido hidráulico es inflamable, los sistemas neumáticos son inherentemente más seguros que los hidráulicos en entornos peligrosamente explosivos.
- Utilización Práctica: Las máquinas hidráulicas utilizan aceite, son autolubricantes y, a menudo, mucho más silenciosas que las herramientas neumáticas, que no se autolubrican. Los compresores y los escapes de las herramientas neumáticas pueden ser especialmente ruidosos, aunque se pueden instalar silenciadores.
Fuente: Blog de la Construcción