En el mercado se pueden encontrar diferentes tipos de brocas para metal, brocas que pueden variar en función de las necesidades que se puedan tener en cada tarea o actividad de mantenimiento. Es interesante saber que las brocas utilizadas para metal también son conocidas como brocas HSS.
Mantenimiento: tipos de brocas para metal
Estos son los principales tipos de brocas para metal que pueden servir para distintos tipos de trabajo y mantenimiento
Aunque las brocas diseñadas para trabajar sobre metal son recomendadas principalmente para esta función, hay que indicar que este tipo de brocas también son aptas para poder trabajar sobre otro tipo de materiales de manera eficaz como plástico, ladrillo e incluso materiales de madera.
Por norma general, las brocas para metal suelen estar elaboradas en acero rápido (HSS), aunque evidentemente la calidad de las brocas utilizadas dependerá de la aleación que posea la misma, así como del método y calidad que se ha usado en su fabricación.
¿Qué son las brocas para metal duro?
Como bien es sabido, las brocas son herramientas de corte que suelen ser fabricadas en distintos metales dependiendo de las calidades de herramienta. Las brocas se emplean poder llevar a cabo orificios o agujeros de diferentes diámetros y profundidades. Éstas han de ser elegidas en función del lugar, posición y material con el cual se vaya a trabajar.
Las brocas estándar para metal son aquellas ideales para poder perforar sobre metales blandos, como pueden ser el cobre y el aluminio, entre otros. En cambio, si se va a taladra sobre metales duros como puede ser el acero inoxidable lo más aconsejable será apostar por brocas que hayan sido fabricadas en cromo-vanadio, cobalto o carburo de titanio. La etiqueta HSS hace referencia a que la broca ha sido fabricada con un metal mucho más duro.
Aunque las brocas son muy utilizadas en nuestro día a día, hay que añadir que las mismas son muy desconocidas por la gran mayoría de usuarios, por lo que resulta conveniente conocer un poco más acerca de sus características particulares y las utilidades que tienen las mismas. Es importante tener muy en cuenta que cuando las condiciones del trabajo son complicadas, es mejor disponer de una broca de mejor calidad.
Partes de una broca para metal
Toda broca, y ello incluye aquellas que son empleadas para perforar metal, constan de diferentes partes que se han de conocer:
- Mango de la broca:
Las brocas disponen de un mango en uno de sus extremos, zona en la cual se lleva a cabo el amarre o ajuste con el taladro.
- Diámetro de la broca:
Cuando se habla del diámetro de la broca para metal se habla de la medida exterior cilíndrica de la herramienta, o lo que es lo mismo, el diámetro de corte de la broca. En otra palabras, es la medida del agujero que se desea o necesita realicezar sobre el material en cuestión con la broca y taladro.
- Longitudes de la broca:
Se pueden encontrar básicamente dos medidas de longitud en las brocas empleadas para trabajar sobre metal. Por un lado, se encuentra la longitud total entre los extremos de la herramienta, mientras que por el otro lado se encuentra la longitud de corte de la broca.
Si nos centramos en la longitud total entre loa extremos de la herramienta hay que destacar que pueden encontrarse brocas de diferentes medidas para un mismo diámetro como, por ejemplo, extra-cortas, cortas, normales, largas y extra-largas. Todo dependerá de la profundidad que se necesite alcanzar a la hora de trabajar en el material en cuestión.
En cuanto a la longitud de corte hay que indicar que la misma viene suelen venir definida por la longitud de la hélice de la broca. Si bien es cierto que solo trabaja la punta de la herramienta, dicha longitud define la profundidad de trabajo mediante el desalojo de la viruta que se desprende en cada labor.
- Ángulo de corte:
El ángulo de corte es aquel ángulo que tiene la broca en la punta, es decir, es la zona de trabajo de la herramienta. Por norma general, los ángulos más comunes que se pueden encontrar son aquellos que oscilan entre los 118º y 135º.
- Ángulo de hélice:
El ángulo de hélice es un ángulo variable que dependerá de las durezas de los materiales con los cuales se vayan a trabajar con la broca. Los ángulos de hélice se distinguen por letras:
- H: La hélice tiene entre 15º y 20º. También se conoce como hélice lenta, siendo ideal para materiales de viruta voluminosa.
- N: La hélice tiene 30º de ángulo. Son utilizadas para todo tipo de materiales.
- S: La hélice tiene 35º y suelen ser empleado para taladrar acero inoxidable.
- W: La hélice tiene entre 40º y 45º. Son ideales para metales como latón y aluminio.
Diferentes tipos de brocas para metal
Si se necesita adquirir brocas para metal es conveniente saber diferenciar los distintos tipos de brocas para metal. Toma nota de las alternativas que tienes a tu alcance:
- Broca HSS laminada: Se trata de la broca para metal más económica del mercado. Es una broca ideal para usos generales en metales y plásticos que no precisen de una gran precisión.
Al tratarse de brocas de menor calidad, ello implica que su durabilidad y resistencia también resulta menor, y ello es debido a que la misma no esta perfectamente calibrada lo que da lugar a que pierda con gran facilidad su afilado con materiales de cierta dureza.
- Broca HSS rectificada: Al contrario que la broca HSS laminada, la broca HSS rectificada es un modelo que ofrece una mayor precisión a la hora de desempeñar cualquier clase de actividad.
Se trata de una alternativa muy recomendada para poder emplear en toda clase de metales semiduros, o lo que es lo mismo, aquellos con hasta 80 Kg. /mm². En este sentido se pueden incluir aluminio, cobre, latón, plásticos, fundición, y mucho más.
- Broca HSS titanio rectificada: Las brocas HSS titanio rectificada son aquellas que se encuentran recubiertas de una aleación de titanio y es esta característica precisamente la que permite que la misma sea capaz de taladrar toda clase de metales y siempre con la mayor precisión posible.
Cuando se dice que puede taladra todo tipo de metales, ello también incluye el acero inoxidable. Estas brocas pueden ser empleadas en maquinaria de gran producción aunque las mismas requieren de refrigeración para su adecuado funcionamiento.
- Broca HSS cobalto rectificada: Cuando se habla de las brocas para metal de cobalto rectificada se está hablando de las brocas para metal de mayor calidad que existen actualmente. Este tipo de brocas pueden taladrar toda clase de metales, y ello incluye aquellos más resistentes y duros, aquellos que alcanzan hasta 120 Kg. /mm² como aceros inoxidables, entre muchos otros.
Una de las características que los hace especiales es que los mismos ofrecen una especial resistencia a la temperatura, de modo que las mismas puedes ser empleadas tanto a elevadas velocidades como a elevadas temperaturas sin que resulte preciso que las mismas sean refrigeradas.
Recomendaciones para taladrar acero muy duro con brocas
Las brocas para metal son herramientas que tienen la gran responsabilidad de soportar esfuerzos de trabajo, de tal manera que es muy común que las mismas se calienten con suma facilidad. Quienes deseen poder alargar la vida útil de su broca no han de pasar por alto en ningún caso proceder a refrigerarla de manera regular para que trabaje con mayor efectividad durante su uso, evitando que su desgaste sea mucho más elevado.
Para poder proceder a refrigerar la broca para metal empleada en cada trabajo lo más recomendable será hacer uso de agua, aceite, taladrina, aceites especiales para taladrado, así como otros líquidos. Los más aconsejable es apostar siempre por refrigerantes que sean de una buena calidad, ya que de este modo se conseguirá aportar un rendimiento mucho más elevado (para ello también será necesario poder asegurarse de que la punta disponga de un buen afilado).
Cuando las brocas para metal trabajan durante muchas horas es muy habitual que las mismas pierdan la forma natural de su afilado. En aquellos casos en los que se de esta situación, lo más recomendable será afilar la broca para lograr hacer un uso adecuado de la misma y garantizar que la misma trabaje al máximo rendimiento.
Un error muy común es emplear una velocidad para perforar demasiado alta. Has de tener muy en consideración que cuanto mayor sea la dureza del material que vas a perforar, más despacio deberá ser la velocidad de taladrado.
Por poner un ejemplo: En el caso de que vayas a taladrar un agujero de 8 mm en latón tendrás que decantarte por una velocidad de 2500 r.p.m (revoluciones por minuto), mientras que si ese mismo agujero pretendes realizarlo sobre acero inoxidable, un metal mucho más duro que el latón, la velocidad indicada para poder agujerearlo sería unas 800 r.p.m.
Recuerda que la seguridad es un aspecto esencial a la hora de trabajar con cualquier taladro y broca, por ello es esencial hacer uso de guantes, gafas de protección, protección auditiva y mascarilla, ya que de este modo podrás evitar que se produzcan accidentes de ningún tipo mientras trabajas.
Fuente: 57Grupo