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Mantenimiento de Compresores de Pistón: Una Guía Esencial

Exploremos los métodos probados y las recomendaciones para el mantenimiento del compresor de pistón, asegurando así su óptimo desempeño y durabilidad.

En el mundo industrial, la eficiencia y la longevidad de las máquinas son pilares fundamentales que aseguran la continuidad y la rentabilidad de las operaciones. Los compresores de pistón, esenciales en diversas aplicaciones desde la fabricación hasta la reparación, requieren un mantenimiento meticuloso para funcionar a su máximo potencial.

El cuidado adecuado de los compresores de pistón no solo prolonga su vida útil, sino que también previene fallos operativos que podrían resultar en costosas paradas de producción. Aquí te dejamos algunas recomendaciones clave basadas en la experiencia de Airum Logistic, un líder en el mercado de compresores.

Mejores Prácticas para la Lubricación de Compresores de Pistón

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  • Marcha y paro: Siempre debemos arrancar y parar el compresor accionando el interruptor del presostato, nunca del enchufe, podría causar graves daños al motor. No enchufar el compresor a alargadores eléctricos, ni enchufes eléctricos de baja intensidad. Puede producir daños al motor. Es preferible la utilización de manguera de presión de aire, si es necesario utilizar a distancia.
  • Presión correcta: El presostato viene regulado a la presión idónea, es aconsejable que no se manipule y no superar bajo ningún concepto la máxima presión indicada por el fabricante.
  • Revisión del Aceite: Es importante comprobar el nivel del aceite regularmente, una primera vez a las 100 horas de la puesta en marcha y sucesivamente cada 300 horas de trabajo. Hay que cambiarlo completamente, nunca ir añadiéndole porque el aceite pierde sus características. Tipo aceite: sae 40 monogrado. Esto asegurará una óptima lubricación de las partes móviles internas del compresor. El tapón del aceite debe ser manipulado siempre de forma manual, nunca con llave.
  • Cuidado del Filtro de Aire: El filtro de aire debe ser limpiado (soplar con una pistola de aire) cada 500 horas o con mayor frecuencia según el ambiente en el que se encuentre el compresor. Un filtro limpio es vital para evitar la entrada de impurezas que pueden afectar el rendimiento y la vida útil del compresor.
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  • Drenaje de Humedad del Tanque: Para evitar la corrosión y otros daños asociados con la humedad, es importante drenar el tanque de aire comprimido periódicamente (semanalmente, como mínimo). De no hacerlo reduce los litros de aire en la caldera y es más probable que el agua llegue a la línea. El grifo de purga debe aflojarse manualmente.
  • Comprobación de la Correa: Revisar y ajustar la tensión de la correa, si es necesario, después de las primeras 20 horas de uso, y posteriormente cada 500 horas, garantiza que el compresor funcione de manera eficiente y segura. El tensado es correcto si apretando con un dedo en la zona intermedia, se obtiene una flexión de 0,6-0,8 cm.
  • Mantenimiento General: Además de las comprobaciones anteriores, se recomienda una revisión general del compresor cada 1000 horas de funcionamiento, que incluya la verificación de todos los componentes vitales para asegurar su correcto funcionamiento.
  • Comprobaciones antes del uso:
    • En compresores trifásicos mirar el sentido de giro cuando se conecte a la red. Si gira al revés se gripará el cabezal.
    • En compresores monofásicos comprobar que la línea sea 220 v sin caídas de tensión. Y el enchufe apropiado a su potencia.

Fuente: SIR

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